viernes, 2 de febrero de 2007




Una extraña sensación…

Es la que he tenido este año con los premios Goya. No vi la ceremonia, estuve en la 2 viendo el documental “Las Misiones Pedagógicas” del que ya os hablé, pero sabía quienes eran los favoritos o nominados y al día siguiente leí quienes “cargaron” con el cabezón.
En los días previos a la ceremonia, se comentó que el Ministerio de Cultura no había prestado el mismo apoyo a todas las películas aunque este comentario se refería concretamente a dos películas, Volver de Pedro Almodóvar y El laberinto del fauno de Guillermo del Toro. Para la primera todo, para la segunda nada. Es más ni siquiera (eso se comenta) el Ministerio quiso presentarla (es una coproducción hispano-mexicana y la mayoría de los actores españoles) y prefirió que lo hiciera México.
El titular de un artículo de El País (domingo 28 de enero de 2007) era: “Los Goya premian esta noche a los mejores del cine de 2006” y yo me pregunto ¿es ésto cierto?, ¿se premia realmente a los mejores?.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

por suerte o por desgracia los goya no son mucho más que un acto de marqueting para la academia de cine español, por lo que no se premian a los mejores sino a los que mejor salgan en los medios, los que más publicidad le den a la academia es decir la P, almodovar, y volver. es triste pero así son los goya, yo personalmente no los veo, ni me interesan más allá que como campaña de marketing, ke éso sí está muy bien montada

Anónimo dijo...

Desde luego que no se premia a los mejores. Los goya pretenden ser un escaparate, no muy bueno, por cierto, de cómo anda el cine en nuestro país. Pero no debemos olvidar, que Almodóvar, a pesar de ser nuestro cineasta más internacional, y salir recurrentemente en los medios de comunicación, ha estado muy denostado por la academia durante mucho tiempo, incluso con peliculas más reconocidas por la crítica internacional que "Volver". No sé si ha sido una estrategia de marketing lo que ha hecho que este año lo gane todo, pero sea como fuere ya era hora que reconocieran su trabajo en su propio país.